¿Estas listo para el matrimonio?

Cómo se puede saber si el ser que queremos nos imagina compartiendo su vida a su lado y hasta el final de su días…? El camino al Altar es para muchas parejas la forma adecuada y de hecho lo es.
El matrimonio es más que una firma en documento y pasar a un nuevo estado civil, significa la mejor manera de decirle a la pareja cuánto se la ama. En términos normales las relaciones que se sujetan únicamente a la convivencia siempre dejan una pregunta latente… Y por qué no se casan?

Pero el camino al Altar no es lo más complicado sino lo que vendrá después y sin embargo quienes se aman profundamente ante este reto están dispuestos a darse por completo porque han asumido los riesgos movidos por la fuerza del amor. Descifrar cuando es el mejor momento es lo oportuno, por lo general para llegar al altar se debe amar comprender y sacrificar, nuestro compañero debe ser aquel que sabe cómo actuar ante nuestros cambios de actitud porque se ha tomado la molestia de conocernos un poco más cada día.

Cuándo nos encontramos en el camino al altar?
Cuando sentimos que la mano de nuestra pareja suele ser noble y dadivosa con nosotros, cuando imaginamos que esa persona nos consuela si fracasamos en vez de fustigarnos con ruines acusaciones, cuando su mirada hacia nosotros se extiende como una suave brisa mágica que nos envuelve, cuando sabe dedicarnos su mejor esfuerzo si nos cuesta dibujar una sonrisa; en fin, no se trata de la cantidad de tiempo sino de la calidad de lo vivido.

El camino al altar es un camino tejido de ilusiones pero también de convicciones. No podríamos ni pensar en casarnos con alguien que sea capaz de valorar más sus ambiciones personales o que no haya aunque sea de vez en cuando realizado un momento bello sólo para ponernos jubilosos.

Nunca olvidemos ser genuinos con lo que sentimos, no disfracemos nuestro comportamiento, si ya encontramos nuestra media naranja démosle un toque de seriedad que nada mal le viene. Los desafíos siempre existirán y muy probablemente dentro de la seguridad del matrimonio se tendrá una comunión y equilibrio impresionantes para hacerle frente a cualquier vendaval. Claro está todo es un proceso y todo debe ser a su debido tiempo.